El Departamento de Trabajo de EE.UU. ha anunciado este jueves que 2,98 millones de personas han pedido subsidios por desempleo en el país.
El brote de coronavirus sigue obligando a muchas empresas a recortar sus plantillas, a pesar de la reapertura gradual de algunos negocios con restricciones en la mayoría de los estados.
Las oleadas de despidos en una economía aún paralizada por el cierre de negocios debido al covid-19 han elevado el número de solicitudes del subsidio de desempleo a más de 36 millones.
No obstante, el número de solicitudes presentadas por primera vez sigue disminuyendo por sexta semana consecutiva, dato que sugiere que cada vez son menos las empresas que están reduciendo sus trabajadores.
Pese a ello, según los estándares históricos, el número de solicitudes semanales sigue siendo enorme, lo que indica que la economía estadounidense se está hundiendo en una grave recesión.
El aumento de las reclamaciones se debe en parte a la Ley de Ayuda, Alivio y Seguridad Económica por el Coronavirus (CARES, por sus siglas en inglés), que fue promulgada por el presidente Donald Trump a finales de marzo y permite reclamar prestaciones a personas con empleos autónomos y contratistas independientes.
