El presidente del PUN, Pedro Corporán, advierte que desde el Gobierno, se pretende despojar al pueblo del último bien que le queda, Punta Catalina
Santo Domingo.- El Partido de la Unidad Nacional (PUN), denunció que se prepara un golpe de estado a la democracia con el ejercicio gubernamental del actual presidente de la república, Luís Abinader Corona.
El presidente del PUN, Pedro Corporán, declaró que la tríada conspirativa la integran el presidente de la República, sectores del alto empresariado y la llamada sociedad civil, decididos a instituir de forma definitiva la plutocracia en el país, un gobierno por y para los ricos.
“Estamos en presencia de un plutócrata, dispuesto a despojar al pueblo dominicano de lo que queda del patrimonio público y acondicionar que finalmente su clase que es la de los ricos, tome todos los controles del Estado”, advirtió Corporán.
Dijo que la llamada relación público-privada no es más que un nuevo ropaje del proceso de privatización que eufemísticamente llaman fideicomiso.
Observó que el último gran golpe contra el pueblo dominicano, lo constituye la decisión del gobierno de comenzar a traspasar el complejo eléctrico Punta Catalina, que terminará en manos del sector privado, usando como trampolín la fiduciaria del Grupo Reservas que encabeza el banco del Estado.
Calificó como una prevaricación gubernamental que en el fideicomiso en referencia se establezca el valor de Punta Catalina en US$2 mil 347 millones, sin que se terminaran las auditorías de la Cámara de Cuentas, además de que el actual presidente de la República se opuso radicalmente a la venta del 50% del proyecto, durante toda la campaña electoral del 2020.
“Calificamos esta decisión como una puñalada trapera a la lucha contra la corrupción pública y privada de la Procuraduría General de la República, sobre un proyecto que costó sangre al pueblo dominicano y que aún constituye el cuerpo del delito de las obras más inmundas de delincuencia pública y privada del anterior gobierno”, manifestó.
Corporán dijo que cada vez más se evidencia que el actual presidente, alcanzó el poder comprometido con sectores de la cumbre empresarial del país y hasta del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).