Exgobernador del Banco Central advierte del hambre y la falta de empleo post Covid-19
Santo Domingo.-El mundo y la sociedad dominicana experimentarán grandes transformaciones en materia social y política por lo que el vicepresidente del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), Guillermo Caram, recomendó al país prepararse para afrontar la nueva realidad que dictará el periodo post COVID-19.
El político afirmó que no es posible seguir con un orden económico caracterizado por rentismo y la especulación, sacrificando producción, generando desempleo, subempleo o informalidad, lo que impide recepción de ingresos estables para satisfacer las necesidades de trabajadores, descuidando producción esencial.
“Para favorecer suntuosidades y vicios, seguir inmutables ante los desequilibrios demo-territoriales y ambientales que se están observando caracterizándose por asentamientos de poblaciones en barrios urbanos hacinados y promiscuos mientras nuestros campos agropecuarios se despueblan”, lamentó.
El exgobernador del Banco Central dice que seguir administrando rentas publicas sin prever reservas para enfrentar contingencias y evitar déficits conducen a endeudamientos para cubrir gastos improductivos, inhibidores del emprendimiento y fomentadores del clientelismo para sostener ambiciones políticas, en lugar de destinarlos a infraestructura productiva y superar precariedades en servicios como abastecimiento de agua y disposición de residuos.
Dijo que el Gobierno tiene que prepararse para enfrentar el desempleo y la falta de trabajo fijo que ocasionan falta o insuficientes ingresos para comprarlos, obligando, ante la falta de almacenamiento en despensas, a los pobladores, salir a buscarlos diariamente.
Aseguró que prepararse para el después implica encarar lo de ahora sin volver a lo de antes, reclamando requisitos compatibles con un liderazgo renovado y preparado para encarar nuevos retos y desafíos.
Estar ampliamente informado a través de servicios de inteligencias económicos y tecnológicos de cómo avanzan y evolucionan internacionalmente las sociedades y las economías, así como las reacciones de los gobiernos para administrarlas
Manifestó que se debe abandonar la mediocridad y mezquindad inspiradoras de celos y afán de protagonismo en una burocracia incapaz de subsistir dentro de regímenes políticos desprovistos de privilegios alcanzados al manejar recursos del erario que aportamos ciudadanos y contribuyentes.