La Confederación Nacional de Trabajadores Dominicanos insiste en seguir lucha hasta lograr que el trabajo decente sea una realidad en RD
Santo Domingo. – La Confederación Nacional de Trabajadores Dominicanos (CNTD insistió en que mantendrá su lucha hasta lograr que el trabajo decente sea una realidad en el país, una conquista que debe ser compromiso no solo del movimiento sindical, sino del Estado, obligado por la Constitución a propiciar el bienestar de sus ciudadanos.
Al conmemorarse este lunes siete de octubre la jornada mundial por el Trabajo Decente, CNTD, precisó que este día encuentra al trabajador dominicano en medio de los desafíos que lo obligan a redoblar esfuerzos para hacer realidad ese objetivo promovido por la OIT y respaldado por millones de trabajadores en el mundo.
El trabajo decente exige “un empleo con derechos y sin discriminación en condiciones seguras y saludables, con remuneración suficiente para vivir dignamente y con protección social”.
Jacobo Ramos, presidente de la CNTD dijo que tras ese logro, su militancia ha marchado en muchas ocasiones como también lo ha reclamado en los escenarios del diálogo y la concertación.
“En la ocasión, recibimos este nuevo aniversario de la jornada mundial del Trabajo Decente, en nuestro reclamo por una nueva ley de seguridad social y un nuevo código laboral”, manifestó el también diputado.
Dijo que, aunque la atención primaria en materia de salud fue establecida en la ley de seguridad social hace más de 20 años, todavía no ha entrado en vigencia tal y como lo exige esa legislación, condición que contribuye a agravar la salud del pueblo dominicano.
Dijo que igual ocurre con el seguro contributivo subsidiado, que deja sin protección social a millares de trabajadores agrícolas, portuarios y de la construcción.
Ramos aseguró que la actual ley de seguridad social es víctima permanente de la elusión fiscal, práctica mediante la cual empresarios evaden el pago de las cotizaciones de sus empleados, al enviar a la Tesorería escalas salariales por debajo del salario mínimo de ley.