Pobre Barahona, no te llegan proyectos, pero si llega, lo torpedean, obstruyen y hasta chantajean

Pobre provincia de Barahona, no llega un proyecto, pero cuando llega, es torpedeado por los funcionarios que tenemos.

La provincia de Barahona, está sumida, en uno de los mayores atrasos de su historia en solo cinco años, porque a nivel de Gobierno, el presupuesto cada año es menor, pero lo poco que se le asigna, tampoco se ejecuta.

Barahona continúa de pie, por sus atractivos dados por la naturaleza, por Dios, porque el hombre, desde los gobiernos, pero con más énfasis en los últimos cinco años, con un afán desmedido para colocar a la Perla del Sur, en uno de los pueblos más atrasados de República Dominicana.

El gobierno del presidente Abinader ha sido de mucho anuncio y pocas ejecuciones, y ahí está la muestra.

Sin embargo, cuando llega un proyecto semi privado, el de 192 apartamentos de la empresa Kohury Industrial, el alcalde de Barahona, Míctor Fernández, lo bombardea, lo obstruye, y yo puedo afirmar, que hasta lo chantajea, como si tratara un asunto de muchachos.

Fernández, en primer lugar, tomó atribuciones que no le competen en la Sala Capitular, al imponerse ante los regidores, para que no emitieran los permisos de no objeción de los estudios de suelo para que pueda arrancar la obra.

Y luego, emite un comunicado, donde hasta exige a la empresa Kohury Industrial, el pago de RD$14 millones, que presuntamente debe de arbitrios, porque de lo contrario, la obra no se ejecutaría.

Lo peor no es que cobre la presunta deuda, es que le advierta que, “si no se pone al día, los regidores no le aprobarían los estudios de suelo y otros requisitos para comenzar la edificación de los apartamentos”, donde también es parte el mismo Gobierno.

O sea, estamos viendo que el Gobierno local, le niega unos permisos al Gobierno central.

…pero, el simple hecho de expresarle “si te pones al día con la deuda se te aprueban los permisos”, no sé ahora, pero cuando yo era estudiante en Barahona, eso se llamaba chantaje, pero como los tiempos cambian tanto, no sé como se le llamaría ahora.

El alcalde Fernández es abogado, sobre bueno o malo, tampoco lo sé, pero sus asesores deben decirle, aunque me dicen que tampoco acepta o coge asesoría, porque todo lo sabe, pero debe saber que la empresa Kohury Industrial está protegida por la Ley de Zona Franca.

Esa clasificación, en el pasado, fue bastante criticada, pero esa es la realidad, fue reclasificada en ese renglón, y no es verdad que, por las apetencias de un alcalde, se vaya a cambiar la ley, pero aún se cambia, no es retroactiva, lo que significa, que el amigo Fernández está haciendo unos disparos hacia el aire y con balas de salva.

Desde la pasada semana hemos estado llamado y escribiéndole al alcalde Fernández, y no responde los mensajes, y nos “rechaza” las llamadas, evidente de que no quiere hablar con nosotros, pero le informamos que no lo llamamos para que nos hable del caso de los RD$273 millones que ha manejado el hospital universitario Jaime Mota de Barahona que le queríamos hablar (metido en un tremendo problema), sino del caso Kohury Industrial.

Dos preguntas, para cerrar.

¿Y qué pasó con el mercado público de Barahona, donde el presidente Abinader dio primer palazo y entregó una primera partida?

Respuesta: Ni mercado, ni cuartos.

¿Qué pasó cuando se construyó la tienda La Serena, justo en los mismos terrenos?

En aquella ocasión, se anunciaba que el proyecto de apartamentos era parte integral del proyecto de La Sirena.

….?pero, los regidores y el alcalde Fernández, aprobaron los permisos?

Respuesta: Claro que sí, rápido y sin deudas.