Consorcio Azucarero Central-Barahona exilia a exempleados al fabricarles falsos expedientes; jóvenes no pueden visitar familiares por persecución del CAC

Batey Ocho, provincia Independencia.-En agosto, reporteros de Armario Libre fueron hasta los bateyes a hurgar el comportamiento del CAC, pero los resultados fueron desastrosos, descubriéndose que las vejaciones y maltratos a los empleados cancelados, era algo que venían haciéndose desde hacía varios años.

Las cancelaciones de los ejecutivos del Consorcio Azucarero Central (CAC), Wander Matos, Orquídea Batista y Edwin Gómez, fue lo que le puso la tapa al pomo de los maltratos de la empresa azucarera, porque en los bateyes, muchos exempleados han tenido que abandonar sus casas y la comunidad, por temor a ser apresados con falsas acusaciones.

Matos, Batista y Gómez, denunciaron que fueron vejados, maltratados, amenazados y secuestrados, por los principales ejecutivos del CAC, para que renunciaran a sus prestaciones laborales de 14 y 19 años de servicios en la empresa azucarera.

Sin embargo, cuando el caso es tratado en los bateyes donde el CAC tiene cientos de empleados, afirman que es una práctica muy recurrente por la empresa azucarera.

Veneco Pérez, hombre que lleva muchos años trabajando en labores sociales y un exalcalde de Batey Ocho, en medio de los campos cañeros, denunció que el CAC está acostumbrado a cancelar a sus empleados y a no pagarles sus prestaciones laborales, acusándolos de robos y otras acciones, por lo que muchas personas de los bateyes han tenido que irse y no se atreven a pisar sus tierras por temor a ser apresados.

Denunció que en esos bateyes hay muchos muchachos que viven exiliados de sus comunidades, por las acusaciones que les han hecho ejecutivos del CAC.

¨Esas personas que fueron canceladas y les negaron sus derechos están en sus casas, pero aquí hay gente que están exiliados de la zona, no solo que les hicieron lo que les hicieron, es que ya no pueden venir a la zona, han tenido que irse¨, denunció.

Dijo que los exempleados de Barahona hablan de vejaciones, torturas y otros males, pero que en los bateyes, son acusados de manera injusta y si los encuentran son encarcelados.

¨Yo puedo reconstruir casos y compartirlos con usted; usted tendrá la oportunidad de conversar con esos afectados, no soy yo, no es conmigo el problema¨, manifestó Veneco.

Dijo que hay persecuciones constantes y vejaciones contra empleados, por parte del CAC en los bateyes.

¨Estas personas (Orquídea, Wander y Edwin) pudieron conversar porque quizás conocen el mecanismo, pero hay gentes de esas que lamentablemente no conocen de normas. Rápidamente me llega a la mente una señora de batey nueve que me dice que su hijo está fuera porque no puede venir por las acusaciones que le tiene el Consorcio¨, precisó.

Dijo que no lo tiene seguro, pero que es posible que en cada batey haya algún caso de persecución a gente de la comunidad por los ejecutivos del CAC.

Veneco Pérez rechazó, además, que el CAC tenga pérdidas en las moliendas de caña, cuando todos los años llevan decenas de vehículos nuevos a los campos de caña.

Condenó que la empresa azucarera lleve con este 2019, cinco años sin entregar las bonificaciones a sus empleados, como está establecido en la Ley de Trabajo.

¨Creo que y digo creo, que ha visto una buena ganancia de los inversionistas, porque los pobres trabajadores siguen recibiendo salarios de miseria¨, dijo.

Cuestionó que un picador de caña gane RD$210.00 y RD$300.00 por día, por lo que los campesinos han optado por complementar la subsistencia comprando un chivo, una vaca o buscar media tarea de tierra para cultivar, pero que ha entrado en conflicto con la empresa azucarera.

Más abusos

Veneco denunció que el CAC mata las plantaciones que siembran los campesinos, las vacas y chivos los hacen abortar y si agarran un caprino, los propietarios deben pagar una multa de RD$500.00 para que se los devuelvan, porque en los campos cañeros, ellos ponen la ley.

Dijo que esos picadores de caña hacen sus sembradíos, pero el CAC les quema las plantaciones, a propósito, con las fumigaciones aéreas.

Calificó como otra maldad, que cuando ejecutivos del CAC agarran un chivito de sus propios empleados, les ponen una penalización de RD$500.00, dinero que muchas veces, no vale el animal.

¨En estos bateyes se habla de que la fumigación ha eliminado toda la vida acuática que teníamos en los drenajes, que era otro recurso que tenía la gente de ir a buscar sus tilapias para comer. Ahora tú vas a un drenaje y aparte de la sequía, eso ha desaparecido¨, sostuvo.

Los criadores de chivos, además, acusan al CAC de hacerles abortar a sus animales, con los insecticidas que fumigan de manera indiscriminada.

Denunció que lo peor del caso, es que lo conoce el Ministerio de Medio Ambiente, como la quema de la caña, producido por los propios empleados del CAC y atribuida a otras personas, calificadas como ¨manos criminales¨.

Expresó que la quema de la caña provoca ira en los habitantes de los bateyes, porque provoca en niños y adultos problemas respiratorios, que tienen entonces que buscar centros de salud en Tamayo y Barahona.

No descartó que jóvenes de las comunidades quemen plantaciones de caña, pero aseguró, que son los menos.

Defensa del CAC

En las comunidades cañeras, no todo está perdido, porque el alcalde de Batey Ocho, David Pérez Julis, destacó los aportes que realiza el CAC en la comunidad.

Dijo que la principal fuente de sustentación de los bateyes de Barahona, Bahoruco e Independencia ha sido la industria azucarera, antes, el Consejo Estatal del Azúcar (CEA) y ahora con el CAC.

Sostuvo que el CAC aporta más del 90% de la mano de obra que hay en Batey Ocho, mientras menos del 5% es aportado por la agricultura.

¨El comportamiento del Consorcio Azucarero Central con la zona cañera, yo diría que ha sido bueno, y cada día va mejorando. Hay que entender un asunto, el Consorcio Azucarero Central es una empresa privada y por lo tanto, el principal objetivo es producir riqueza como todo capitalista; sin embargo, además de producir riquezas para sus intereses, han estado trabajando en coordinación con las comunidades y las organizaciones, los ayuntamientos y cada día hemos ido logrando mayor aporte del CAC; nosotros estamos vinculados al Consorcio y el Consorcio ha estado vinculado a nosotros¨, manifestó Pérez Julis.

Expresó que la comunidad ve al CAC como quien tiene que resolverle sus problemas, pero que hay otra realidad en esas comunidades, y es que en esas comunidades no han visto al Gobierno ayudando a resolver problemas.

Sostuvo que el CAC ayuda al Gobierno, por ser en la zona cañera, el mejor empleador, además de que ayudan con los problemas que se presentan en la comunidad.

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