Tony Raful considera en vez de perseguir a Zapete las autoridades deben aclarar denuncia
Santo Domingo.-El dirigente del Partido Revolucionario Moderno y expresidente del Parlamento Centroamericano (PARLACEN), afirmó que existen sobradas razones para las reacciones de alarma y solidaridad ante la denuncia del periodista Marino Zapete de que tras una demanda en su contra se esconde la determinación de las autoridades de seguir acallando voces independientes del periodismo nacional.
Tony Raful dijo que “es conocida la situación de una gran cantidad de comunicadores, entre ellos el propio Marino Zapete, Altagracia Salazar, Edith Febles, Ricardo Nieves y otros a los que presiones oficialistas han sacado de sus espacios, con denuncias de presiones a dueños de los medios o, a través de otros mecanismos, precisamente por ser comunicadores que saben llamar al pan, pan, y al vino, vino”.
“La saña en contra del periodista, como parte del plan de amedrentamiento a la comunicación social independiente, queda evidenciada en el hecho de que la demanda que le hace una hermana del Procurador General de la República, se origina en una investigación realizada por un destacado abogado.
“Lo que ha hecho Zapete es hacerse eco, exponer esa investigación para que el país la conozca y que si tiene mérito las autoridades hagan las investigaciones de lugar.
“En vez de presionar a Marino lo que deben hacer las autoridades es esclarecer la denuncia, pues involucra nada más y nada menos que al que en la actualidad es candidato a la presidencia de la República”, precisa Raful.
Afirma que en sectores nacionales existen reservas de que los ataques de las autoridades a la prensa, ha sido parte de una estrategia recomendada al Gobierno por consultores internacionales, para mantener bajo control hegemónico la opinión pública nacional.
Franjul también citó un reciente comentario editorial del actual representante de la SIP, José Monegro, director de El Día, quien observó en un comentario editorial que «mal se haría con perseguir al mensajero, porque entonces se les estaría diciendo a los demás que no cuestionen ni reclamen a no ser que se quieran ver frente a un tribunal.